11 diciembre 2023

Sesión 33: Marcelina, la acosadora que pretendía ser sutil

Nombre: Marcelina.
Identificación: profesora de universidad.
Edad: Cincuenta y muchos.
Diagnóstico: acosadora.
 
Fui a la revisión de un examen en penúltima convocatoria. No es que lo hiciera bien o mal, es que no lo hacía como Marcelina quería. Me corrigió cosas absurdas, cosas que estaban bien, pero no estaban dichas con SUS palabras. Y nunca iban a estarlo porque ella era leísta y yo no y esa brecha es imposible de cerrar.
 
El caso es que yo estaba bastante agobiada porque me mandaba a última convocatoria. Y ahí vino el acoso. No hizo falta que dijera de manera explícita “si me dejas follarte, apruebas”. Era su primer movimiento conmigo, tenía que ser discreta porque yo no había mostrado ningún tipo de interés hacia ella que no fuera ese examen.
 
Mi cara cuando me dijo que podía ir a verla cuando quisiera para hablar del tema debió de ser un poema porque se puso nerviosa y enseguida salió con que fulanita y menganita lo habían hecho y luego habían aprobado.
 
Marcelina de mis entretelas, pobre inocente, no sabía que yo soy la oveja negra allá por donde voy y lo que hagan o no mis compañeras me importa una mierda.
 
No, claro que no le dije eso, tenía que aprobar la última convocatoria, pero igual que ella no me dijo “si me dejas follarte, apruebas” y yo entendí, ella también entendió y se tuvo que conformar con un buen montón de calabazas.

7 comentarios:

  1. Esta experiencia tiene que haber sido mucho más dura de lo que suena aquí (por el tono casi ligero empleado).
    Siempre he pensado cómo debe ser atreverse a buscar sexo con alguien de tu sexo cuando ya no es fácil pedírselo a alguien del otro. Cómo decides que esa persona juega en tu equipo y puede querer algo contigo y te lanzas a pedírselo. Todo lo que arriesgas ya que sigue habiendo homofobia. Pero aquí hay varios aspectos peores. Una señora de cierta edad, en relación profesora-alumna así que desde una situación de poder... Esa mujer no tenía ningún freno moral. Y no lo digo porque le gustasen las mujeres precisamente. Lo digo porque quien tenía que dar ejemplo era la menos ejemplar.
    No deja de sorprenderme tu maravilloso profesorado. Creo que tu mayor triunfo es haberles superado a ellos. Pasar exámenes puede ser más fácil que sobrevivir a un profesor-a.

    ResponderEliminar
  2. En el colegio tuve profesores maravillosos (excepto Divina, que está en blog); en el instituto sólo me tocaron dos desequilibrados (una de ellas, Eloísa, también está por aquí), el resto eran normales, buenas personas y algunos, profesores magníficos. Pero llegué a la universidad... Pasé por tres y lo raro era encontrar a alguien majo, buena persona y además buen docente.
    El caso de esta entrada fue de lo peor y por suerte no fue algo explícito, con guarradas, ni intentó tocarme, creo que por el motivo que comentas, que era una mujer tanteando el terreno. Pero fue muy desagradable, y me hizo ir acojonada al último examen. Y eso fue lo que me cabreó, la situación de abuso, de una señora con poder a punto de entrar en la tercera edad sobre una alumna y no que las dos fuéramos del mismo sexo. Me sentí indefensa y sabía que si suspendía ese examen no valía de nada denunciar (aunque lo habría hecho).
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Ahora si me quedé de piedra. El poder como en algunos o sino es que en todos puede ser tán "normal" y ejercerlo valiendote normas, jerarquias, objetivos....
    Que cosas... me encantan muchas expresiones que usas como lo de las calabazas :)

    Beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cuando los creadores de Spiderman inventaron aquello de todo gran poder conlleva un gran responsabilidad no pudieron dar más en la diana. Esta y el de la entrada anterior eligieron utilizar su superioridad mal. Me resulta como poco triste. :(
      Me alegra de que te gusten esas expresiones. A mí también me encanta leeros a los que estáis en Latinoamérica y la literatura latinoamericana, aunque tenga que mirar el diccionario a cada rato. Y no acabo de entender eso del afán por el idioma neutral porque es perder toda la riqueza del idioma conseguida durante siglos.
      Un abrazo enorme.

      Eliminar
    2. Abrazos enormes de año nuevo :) es muy bueno el poder que tenemos... De leernos y compartír.
      :)

      Eliminar
  4. He tenido experiencias semejantes con profesoras pero no por motivos sexuales, sino incomprensibles (tal vez a algunos profesores les molestan los alumnos que saben o estudian bien). Y no me ha tocado ser víctima de acoso sexual, sin embargo comprendo perfectamente la problemática que planteás.
    En cualquier caso lo que rescato, más allá de la buena síntesis del relato, es la valentía de negarse. Felicito.
    Un gusto encontrarme con tu sitio.
    Saludos desde Argentina.
    PD no sé que significa "dar calabazas", perdón.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Los casos que comentas no son una rareza. Supongo que son personas con inseguridades que podrían ver a los estudiantes como competidores, o les hace lo que su profesores les hicieron a ellos. A saber. Menos mal que a pesar de todo esto, hay gente agradable por ahí. Sólo que contamos lo malo. :D
      Negarse es difícil. Creo que en aquel momento no era consciente de lo que podía conllevar, y casi mejor!
      Dar calabazas significa rechazar a alguien en el terreno sentimental/sexual. No hay problema, pregunta lo que necesites. :)
      Un saludo y gracias por pasarte.

      Eliminar